Todas futuras mamás que vemos en nuestro centro de Ecografía 5D en Sevilla nos comentan que las alteración del gusto y el olfato en el embrazo llegan a ser molestas, y cómo dejaron de gustarle algunas comidas que les encantaban, mientras devoran otras que apenas comían antes de estar embarazadas, así como, comienzan a sentir una agudeza inusitada del olfato, pero ¿Por qué sucede esto?
Alteraciones del gusto y el olfato en el embarazo
El gusto y el olfato son tan sensibles a los cambios hormonales en el embrazo que algunas mamás detectan que están embarazadas precisamente por el rechazo que comienzan a tener hacia algunas comidas y a las náuseas que le provocan algunos olores, así como por la transformación de los sabores al entrar en la boca.
Al igual que sucede con al olfato, las alteraciones en el gusto se deben a los cambios hormonales y a le estrógenos que se producen en el embarazo.
Los antojos en el embarazo
Los cambios del sentido del gusto y del olfato que experimentan las embarazadas están íntimamente relacionada con los popularmente denominados “Antojos”, es decir con esas ansias repentinas de sentir la sensación en la boca de un determinado sabor.
Algunos sabores actúan como un ansiolítico natural que calma el desasosiego que en las mamas gestantes producen las hormonas.
Es necesario cuidar que estos “antojos” no alejen a la mamá de la dieta equilibrada que ha de llevar durante el embarazo.
Una vez ha terminado el embarazo las alteraciones sensoriales desaparecen y la mamá empieza a reencontrarse con su gusto y su olfato tal como lo tenían antes.
Ya sabéis #gestomamis, no alarmaros por los cambios en gusto y en el olfato, pues son totalmente normales e inocuos durante el embrazo.