La sociedad está atravesando una de las crisis más graves de la historia en todos los aspectos, esta pandemia ha generado un aumento de los casos de ansiedad, llegando a duplicarse desde Marzo en España. Las embarazadas, grupo de riesgo para casi todo, no escapan de esta frenética pandemia que las somete a pruebas en soledad, a desplazamientos con mascarilla y a incertidumbre constante, pero ¿Cómo afecta el estrés en el embarazo y qué relación tiene con el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)?
Según un estudio realizado en 2010 por la Universidad Javeriana de Bogotá, Colombia, ya advertía de una relación entre el estrés de las embarazadas y el grado en el que se manifestaba el TDAH en el futuro niño.
Ya en 2019 un nuevo estudio, cuyo resultados fueron publicados en la revista Redacción Médica, vino a corroborar la relación entre el estrés durante el embarazo y la probabilidad de que el niño desarrolle síntomas de TDAH.
Teniendo en cuenta esta relación y la actual situación de pandemia que promueve la aparición del estrés, los psicólogos aconsejan las siguientes técnicas y procedimientos para reducir la ansiedad:
- Hablar con otras madres, compartir vivencias y estados de ánimos. Es bueno saber que hay más personas en la misma situación.
- Disponer de un periodo de tiempo libre al día y dedicarlo a algo que relaje o entretenga, ya sea la lectura, manualidades, etc. pero que mantenga a la mente alejada de deberes y obligaciones pendientes.
- Dejar de querer controlarlo todo, asumir que no se puede ser perfecta y admitir que se hace que lo se puede, sin preocuparse de lo que no da tiempo a hacer.
- Pedir ayuda a familiares y amigos en las tareas que más cuestan, así como para contarles cómo se siente. Es importante estar sola el menor tiempo posible.
- Descansar cuando se necesite, y no cuando esté programado en el día.
Queridas #gestomamis, corren tiempos difíciles, pero que nada os impida disfrutar del milagro de la vida.